Definir el principal problema de México es una tarea difícil que involucra reflexionar en el entorno, en cuestionarse por qué suceden las cosas, cómo lo hacen y dónde radica la complejidad en cambiar la realidad. Definir el principal problema de nuestro país, también implica hacer un ejercicio de introspección y análisis de conciencia, para encontrar dentro de uno mismo las respuestas a porque actuamos con ciertas características como individuos, y entender cuáles de esas características que tenemos como personas compartimos con nuestra sociedad, al grado de que se vuelven características culturales. Esta reflexión con la cual arranco me lleva a no poder definir un problema por si como el principal problema, si no me lleva a ver a todos los problemas que asedian a nuestro país como originados por la misma causa, y esta causa es la educación que hemos tenido y desarrollado como sociedad.
Antes de empezar de lleno el presente ensayo, quisiera confesar que escogí este tema debido a que en muchas ocasiones he hablado de los problemas en mi país, y siempre es complicado llegar al fondo u origen de las causas de estos, sin embargo yo encuentro la trascendencia de este tema en que al conocer los problemas, se pueden proponer las soluciones, y accionar tales.
Por educación no es necesario entender solamente las etapas que pasa la gran mayoría de los individuos desde que asiste a la escuela y su paso por cada una de las etapas de la educación escolarizada. Pienso que la mayor educación del individuo no se da directamente en la escuela, si no en diversos lugares que incluyen la familia, los vecinos con los que se comparten actividades de recreo, la televisión, etc. Por educación debemos de ser más ambiciosos y entenderla si se me permite, como la metáfora de los golpes que da el hombre de mármol en su propia escultura, esta se aprecia medio cuerpo definido y medio cuerpo en bruto, y cada martillazo que el mismo aplica a la roca lo define más y más. Entonces y en base a esta metáfora, por educación podemos decir que es la manera en la que individuos o sociedades entienden la vida, desde su pasado, hacia donde quiere llegar y como se define a sí mismo en el presente.
Haciendo énfasis en lo anterior, y tomando como perspectiva a nuestro país, considero que no nos es claro a nivel colectivo que clase de sociedad queremos ser a fin de definirnos como tal, y buscar encaminar nuestros esfuerzos colectivos a ser lo más cercano al ideal de sociedad que deseamos, este ejercicio se supone debe de ser la fiesta de la democracia que jugamos cada que elegimos cualquier representante popular, sin embargo es más que cierto que en nuestro país la campaña la hacen los medios y no los proyectos, son los candidatos los personajes principales, y no así el pueblo y sus necesidades reales.
Como sociedad tenemos deudas históricas que aclarar con nuestra propia identidad, no entendemos nuestro origen, por el contrario vivimos en la confusión y la no aceptación de este por haber sido desvalorado desde su origen mismo. No logramos creer en que como individuos separados no hacemos gran fuerza de cambio y acción, pero que como individuos unidos tenemos un inimaginable potencial de cambio, nos es tan normal tener pensamientos en nuestra cabeza colectiva como que los políticos están ahí por “el hueso”, por hacer uso del poder para robar, que hasta pareciera en nuestras justificaciones que permitimos que todo eso suceda, es más he escuchado de gente de edad adulta, joven e infantil referirse a nuestro país como “solo pasa en México” al hacer referencia a los peores vicios del Mexicano.
Todo lo anterior son escenarios que no deberían por principio existir, sin embargo son reales, y esto nos lleva a concluir que hay en nuestra manera de concebir la vida vicios educativos que nos impiden clarificar el camino a seguir para el propio desarrollo. No podemos permitirnos seguir con esta mentalidad extraviada en el sin sentido, que no se reconoce así misma como triunfadora sino como vencida, y que permite la corrupción, al reconocerlo estamos fundando erróneamente nuestra educación.
Por educación mal fundada me refiero a que los valores de esta no son del todo propicios para poder definir una sociedad deseada, explico lo anterior con los siguientes ejemplos: en nuestro país el rubio es mejor percibido que el moreno, esto es histórico totalmente, pero al mismo tiempo es un reto que debemos de arreglar si no queremos ser una sociedad racista consigo mismo y entreguista con el que mayores características extranjeras presente solo por complejo de inferioridad. Otro ejemplo es que no estamos acostumbrados a exigir la rendición de cuentas seria a cualquier persona con mayor poder que nosotros, histórico también, sin embargo en el caso de la política, la cual se encuentra muy desvalorada por su poca eficacia en mejorar las condiciones de vida junto con su gran avaricia, la rendición de cuentas es primordial para resaltar los avances a la construcción de la nación deseada, concebimos el trabajo del gobernante como un puesto de impunidad, dotado de poder y corrupto, y por principio estos son servidores públicos, y su trabajo es servir al final del día. Y como un tercer ejemplo en cuanto a la mala organización que tenemos al trabajar en equipo, donde es más común encontrar justificaciones para no realizar una determinada tarea, que escuchar de manera proactiva a los miembros de un equipo discutir sobre lo que deben de hacer para llegar todos a un fin común.
La mayor virtud que te puede dar la educación es despertar la conciencia y sensibilidad para poder entender los retos sociales existentes y dar soluciones a estos mismos. No me explico de que manera queremos despertar una sana conciencia con valores nacionales fuertes que nos permitan crear un mejor país, si los medios de comunicación masivos, que al final son los que tienen mayor alcance, muestran el racismo de manera abierta, ponderan la importancia del ser humano en fines económicos, imponen maneras extranjeras de hablar, vestir, lucir físicamente y lo que es peor, te educan a pensar en base a su propuesta, todo lo anterior justificado por el consumo material. Sin embargo este tipo de educación no construye propuestas, impone maneras pre diseñadas de concebir la vida, y esto último es una aberración, los cambios sociales deben de venir del interno de la sociedad misma, no de la masificación del pensamiento único social.
Al no ser una sociedad del todo consiente con su entorno, lo cual es una carencia educativa, nos limitamos a vivir al día, a trabajar al día, a sufrir y disfrutar al día, no planeamos a mediano y largo plazo, vivimos en el caos de la improvisación, en la miseria, y somos por tal víctimas del abuso de quienes se han percatado que al estar en la bruma de la no conciencia, no nos organizamos y llegamos a desarrollar sentimientos de no importancia en la realidad, pareciera que preferimos pasar de largo sin cuestionar porque las cosas, sin discutir entre nosotros mismos las diferentes soluciones, preferimos no pensar y solo actuar para llenar nuestras necesidades básicas.
Me he percatado de entre mucha gente que he conocido de diferentes niveles socioeconómicos, culturales, con diversas posibilidades a lo largo de su vida, cuando preguntas que es lo que buscan en su vida, causas el efecto característico de una pregunta incomoda, y se observa en sus respuestas que no hay grandes cuestionamientos sobre esta básica pregunta. Deduzco entonces que al no estar conscientemente decididos a lo que buscamos nos cegamos, no tenemos claro hacia donde queremos ir en la vida como individuos, mucho menos como sociedad.
La creación de conciencia individual y social, entendida como consecuencia de cuestionamientos y reflexiones internas, debe propiciarse por medio de diversas actividades como la lectura, el arte, la reflexión, la empatía social, debe de haber figuras de liderazgo al interno de la sociedad que volviendo a nuestra metáfora inicial, inviten a los demás a martillarse a sí mismos y por propia convicción, a fin de poder evolucionar en una línea de conciencia.
Entonces deducimos que la educación es un arma política, que acciona cambios, esta no puede y nunca debe ser neutral, es decir esta no solo debe de limitarse a alfabetizar o a proporcionar herramientas técnicas a sus educandos, esta debe de buscar despertar la sensibilidad y el entendimiento del mundo y sus problemas, hablar de una “educación neutral” que no busque transformar es hablar de educación limitada. “El mito de la neutralidad de la educación, que lleva a negar la naturaleza política del proceso educativo y a tomarlo como un quehacer puro, en que nos comprometemos al servicio de la humanidad entendida como abstracción, es el punto de partida para comprender las diferencias fundamentales entre una práctica ingenua, una práctica “astuta” y otra crítica” Paulo Freire (1990:109) 1.
Deduciendo que la educación genera conciencia, y que la conciencia agudiza las exigencias sociales en cuanto a crítica del entorno, cambiando los niveles aspiracionales de vida a valores no solo materiales, propiciando por tal mayor desarrollo del individuo dentro de la sociedad misma, incrementando el desarrollo humano en los ámbitos culturales, de visión para detectar oportunidades de desarrollo, de capacidades y habilidades que pueden servir a generar flujos económicos enfocados al desarrollo social.
Por tal no debemos estar equivocados al sustentar nuestra apuesta nacional a re definir una educación que abarque desde el origen de nuestra identidad, a fin de re plantearla y revalorarla, que critique ampliamente la inequidad en los bienes y la riqueza en nuestro país, (problemática mencionada por Morelos en la fundación de nuestra nación), y que proponga alternativas justas de crecimiento social, con rumbo definido donde la prioridad no sea solamente la generación de riqueza empresarial con la justificación de generación de empleos, si no la equidad de oportunidades de desarrollo y sensibilización en el otro como seres iguales, donde nadie sea superior o inferior, solo más capacitado tal vez, y esto implica a su vez compromiso de desarrollo colectivo con el que se encuentra en una posición de desventaja.
Al replantearnos esta manera de pensar diferente, atacamos problemas que asfixian al país no dejándonos avanzar. Como ejemplo, la impunidad histórica que hemos sufrido nos ha llevado al salvajismo y a la prepotencia en todos los niveles, al haber educación fuerte, consiente y crítica, podemos pensar que las exigencias del pueblo serán mayores y reales por no permitir la impunidad en los sistemas de justicia social. Evidentemente al tocar este punto hablamos de la gran podredumbre que existe en el sistema de justicia hoy día, donde en la mayoría de los casos los favorecidos económicamente son impunes a esta, y el resto de la población es juzgada inequitativamente.
Otro problema actual es la falta de oportunidades generalizada en todos los niveles nacionales. Desde los segmentos económicamente desfavorecidos, donde la migración a las urbes desarrolladas en el interno del país o en el exterior de este es la solución generalizada que orilla a los habitantes de una población a salir del lugar donde han habitado a buscar oportunidades como mano de obra barata para elevar su condición económica, o en los segmentos medios, donde el recién graduado acaba generalmente haciendo trabajos que nunca pensó hacer en su vida de estudiante, y para los cuales nunca visualizo como motivación a realizar sus estudios, este termina siendo mal pagado, atrapado en una frustración donde no es clara la salida. En todo nivel social, al tener como centro de nuestra dinámica la generación de riqueza como fin mismo y no como fin desarrollador de la sociedad, una de las razones de la polarización de la riqueza, en donde quien es económicamente poderoso a comparación de los otros trabajará su vida entera para darse placer a sus necesidades exteriormente creadas, elevando cada vez más su riqueza, y quien es económicamente dependiente, trabajará su vida entera para apenas saciar sus necesidades básicas en el mejor de los casos, incrementando así con el paso del tiempo, cada vez más su miseria. Esta falta de oportunidades, por lo anteriormente explicado, es un círculo vicioso, que no parará más que en el desperdicio del potencial comunitario o en el desorden del caos social.
El día 10 de Noviembre del año en curso, el periódico la Jornada publicó una nota donde Arturo Mendicuri Narro, presidente de la Cámara Nacional de Comercio de la ciudad de México (CANACO), al hablar de la problemática actual de los “Ninis”, explica “que al ver negado el acceso al trabajo y el estudio, este sector de la población cae en el desencanto y la desesperación y ya no se esfuerzan por encontrar caminos dentro de la sociedad” 2. Más adelante Mendicuri agrega, “la sociedad debe trabajar en conjunto con los gobiernos para rescatar a estos jóvenes, pues se trata de una problemática en la que estamos involucrados toda la sociedad”. 2
Ángel Segura, presidente del Comité Nacional de Consulta y Participación de la Ciudadanía en Seguridad Pública, menciona en la misma nota citada en el párrafo anterior, “que se ha detectado, por ejemplo, que en algunos lugares del país los jóvenes están pensando en tener un promedio de vida de 15 a 25 años, involucrados en el narcotráfico”, comenta, “se trata de reconstruir el tejido social, ayudando a los jóvenes a salir de esa situación, generando políticas públicas para que tengan visión de vida diferente, tarea de la que la sociedad también se debe de hacer responsable desde sus casas y sus comunidades”. 2
Samuel Bowles comenta que en Estados Unidos las escuelas no han evolucionado hacia la igualdad, ya que sólo cubren .las necesidades de mano de obra calificada y disciplinada de los empleadores capitalistas (Bowles, 1977:137) 3. Esto refuerza el argumento, en el que la situación actual de oportunidades laborales, de desarrollo profesional y personal que vivimos hoy en día en nuestro país, ha desencadenado un malestar generalizado en la gente joven específicamente, dejando un sin sentido, donde el modelo de educación que vivimos actualmente, generador de trabajadores para las empresas, no brinda a los educandos las expectativas de vida y desarrollo que buscan, al contrario, brinda una depresión que lleva a la gente a la pasividad, dejando de lado el potencial principal de un país, el cual es su gente, brindando mentalidades perdidas en el sin sentido de “ni estudiar ni trabajar.”
La política es en un sentido, la voz del pueblo, tomando relevancia en el desencanto de la sociedad con su realidad inmediata, lo que hace imperativo el tomar el tema de replantear el pacto social desde la educación para dar solución a esta situación que se agudizan con el paso del tiempo. Por tal la política debe de accionar los cambios reales a estas perspectivas donde no pareciera haber sentido en estudiar y laborar, donde el modelo educativo actual no propicia el desarrollo de conciencias libres, propositivas y críticas, donde encontramos perdido al individuo como una pieza utilitaria en el engrane de la generación de capital y no así de desarrollo social colectivo.
Por tal, por muy devaluada que este al día de hoy el papel del político, debe de hacerse frente por medio de esta herramienta a este problema de fundamentos de valores sociales, deben de propiciarse las oportunidades reales al desarrollo del individuo, abarcando desde la manera en que este se concibe a si mismo dentro de la sociedad, el valor de su aportación a esta, el papel de no permitirse corromperse como persona, pues al hacerlo está permitiendo que se corrompa la sociedad misma, debe de ser valorado el hecho de levantar la voz y señalar la impunidad y la prepotencia, debe de centrarse el modelo económico y social actual en la persona y su desarrollo pleno en la sociedad.
Termino el presente escrito citando a Eduardo Galeano, donde habla del sistema económico de América Latina, en donde la educación forma parte de este sistema de empleados en servicio de la empresa generadora de capitales, y no generador de hombres libres con conciencias constructivas:
“El sistema encuentra su paradigma en la inmutable sociedad de las hormigas. Por eso se lleva mal con la historia de los hombres, por lo mucho que cambia. Y porque en la historia de los hombres cada acto de destrucción encuentra su respuesta, tarde o temprano, en un acto de creación”. 4
Tenemos frente a nosotros la oportunidad histórica de replantear nuestra manera de concebir la vida, de educarnos, de concebirnos. De la sociedad deben de surgir las propuestas, y es la política la encargada de escuchar al pueblo que representa, en ella recae la obligación de generar las fuerzas de acción que permitan el desarrollo de la sociedad dentro de ella misma, generando individuos sensibles, críticos, conscientes, con visión de hacia dónde ir en el mediano y largo plazo, esa “creación” de la que habla Galeano, es la creación de oportunidades reales de desarrollo, y para hacerlo se debe de poner al hombre como centro del sistema, y no como generador de capital solamente, el individuo es más complejo que esa propuesta que equivocadamente hemos seguido por mucho tiempo.
Antes de empezar de lleno el presente ensayo, quisiera confesar que escogí este tema debido a que en muchas ocasiones he hablado de los problemas en mi país, y siempre es complicado llegar al fondo u origen de las causas de estos, sin embargo yo encuentro la trascendencia de este tema en que al conocer los problemas, se pueden proponer las soluciones, y accionar tales.
Por educación no es necesario entender solamente las etapas que pasa la gran mayoría de los individuos desde que asiste a la escuela y su paso por cada una de las etapas de la educación escolarizada. Pienso que la mayor educación del individuo no se da directamente en la escuela, si no en diversos lugares que incluyen la familia, los vecinos con los que se comparten actividades de recreo, la televisión, etc. Por educación debemos de ser más ambiciosos y entenderla si se me permite, como la metáfora de los golpes que da el hombre de mármol en su propia escultura, esta se aprecia medio cuerpo definido y medio cuerpo en bruto, y cada martillazo que el mismo aplica a la roca lo define más y más. Entonces y en base a esta metáfora, por educación podemos decir que es la manera en la que individuos o sociedades entienden la vida, desde su pasado, hacia donde quiere llegar y como se define a sí mismo en el presente.
Haciendo énfasis en lo anterior, y tomando como perspectiva a nuestro país, considero que no nos es claro a nivel colectivo que clase de sociedad queremos ser a fin de definirnos como tal, y buscar encaminar nuestros esfuerzos colectivos a ser lo más cercano al ideal de sociedad que deseamos, este ejercicio se supone debe de ser la fiesta de la democracia que jugamos cada que elegimos cualquier representante popular, sin embargo es más que cierto que en nuestro país la campaña la hacen los medios y no los proyectos, son los candidatos los personajes principales, y no así el pueblo y sus necesidades reales.
Como sociedad tenemos deudas históricas que aclarar con nuestra propia identidad, no entendemos nuestro origen, por el contrario vivimos en la confusión y la no aceptación de este por haber sido desvalorado desde su origen mismo. No logramos creer en que como individuos separados no hacemos gran fuerza de cambio y acción, pero que como individuos unidos tenemos un inimaginable potencial de cambio, nos es tan normal tener pensamientos en nuestra cabeza colectiva como que los políticos están ahí por “el hueso”, por hacer uso del poder para robar, que hasta pareciera en nuestras justificaciones que permitimos que todo eso suceda, es más he escuchado de gente de edad adulta, joven e infantil referirse a nuestro país como “solo pasa en México” al hacer referencia a los peores vicios del Mexicano.
Todo lo anterior son escenarios que no deberían por principio existir, sin embargo son reales, y esto nos lleva a concluir que hay en nuestra manera de concebir la vida vicios educativos que nos impiden clarificar el camino a seguir para el propio desarrollo. No podemos permitirnos seguir con esta mentalidad extraviada en el sin sentido, que no se reconoce así misma como triunfadora sino como vencida, y que permite la corrupción, al reconocerlo estamos fundando erróneamente nuestra educación.
Por educación mal fundada me refiero a que los valores de esta no son del todo propicios para poder definir una sociedad deseada, explico lo anterior con los siguientes ejemplos: en nuestro país el rubio es mejor percibido que el moreno, esto es histórico totalmente, pero al mismo tiempo es un reto que debemos de arreglar si no queremos ser una sociedad racista consigo mismo y entreguista con el que mayores características extranjeras presente solo por complejo de inferioridad. Otro ejemplo es que no estamos acostumbrados a exigir la rendición de cuentas seria a cualquier persona con mayor poder que nosotros, histórico también, sin embargo en el caso de la política, la cual se encuentra muy desvalorada por su poca eficacia en mejorar las condiciones de vida junto con su gran avaricia, la rendición de cuentas es primordial para resaltar los avances a la construcción de la nación deseada, concebimos el trabajo del gobernante como un puesto de impunidad, dotado de poder y corrupto, y por principio estos son servidores públicos, y su trabajo es servir al final del día. Y como un tercer ejemplo en cuanto a la mala organización que tenemos al trabajar en equipo, donde es más común encontrar justificaciones para no realizar una determinada tarea, que escuchar de manera proactiva a los miembros de un equipo discutir sobre lo que deben de hacer para llegar todos a un fin común.
La mayor virtud que te puede dar la educación es despertar la conciencia y sensibilidad para poder entender los retos sociales existentes y dar soluciones a estos mismos. No me explico de que manera queremos despertar una sana conciencia con valores nacionales fuertes que nos permitan crear un mejor país, si los medios de comunicación masivos, que al final son los que tienen mayor alcance, muestran el racismo de manera abierta, ponderan la importancia del ser humano en fines económicos, imponen maneras extranjeras de hablar, vestir, lucir físicamente y lo que es peor, te educan a pensar en base a su propuesta, todo lo anterior justificado por el consumo material. Sin embargo este tipo de educación no construye propuestas, impone maneras pre diseñadas de concebir la vida, y esto último es una aberración, los cambios sociales deben de venir del interno de la sociedad misma, no de la masificación del pensamiento único social.
Al no ser una sociedad del todo consiente con su entorno, lo cual es una carencia educativa, nos limitamos a vivir al día, a trabajar al día, a sufrir y disfrutar al día, no planeamos a mediano y largo plazo, vivimos en el caos de la improvisación, en la miseria, y somos por tal víctimas del abuso de quienes se han percatado que al estar en la bruma de la no conciencia, no nos organizamos y llegamos a desarrollar sentimientos de no importancia en la realidad, pareciera que preferimos pasar de largo sin cuestionar porque las cosas, sin discutir entre nosotros mismos las diferentes soluciones, preferimos no pensar y solo actuar para llenar nuestras necesidades básicas.
Me he percatado de entre mucha gente que he conocido de diferentes niveles socioeconómicos, culturales, con diversas posibilidades a lo largo de su vida, cuando preguntas que es lo que buscan en su vida, causas el efecto característico de una pregunta incomoda, y se observa en sus respuestas que no hay grandes cuestionamientos sobre esta básica pregunta. Deduzco entonces que al no estar conscientemente decididos a lo que buscamos nos cegamos, no tenemos claro hacia donde queremos ir en la vida como individuos, mucho menos como sociedad.
La creación de conciencia individual y social, entendida como consecuencia de cuestionamientos y reflexiones internas, debe propiciarse por medio de diversas actividades como la lectura, el arte, la reflexión, la empatía social, debe de haber figuras de liderazgo al interno de la sociedad que volviendo a nuestra metáfora inicial, inviten a los demás a martillarse a sí mismos y por propia convicción, a fin de poder evolucionar en una línea de conciencia.
Entonces deducimos que la educación es un arma política, que acciona cambios, esta no puede y nunca debe ser neutral, es decir esta no solo debe de limitarse a alfabetizar o a proporcionar herramientas técnicas a sus educandos, esta debe de buscar despertar la sensibilidad y el entendimiento del mundo y sus problemas, hablar de una “educación neutral” que no busque transformar es hablar de educación limitada. “El mito de la neutralidad de la educación, que lleva a negar la naturaleza política del proceso educativo y a tomarlo como un quehacer puro, en que nos comprometemos al servicio de la humanidad entendida como abstracción, es el punto de partida para comprender las diferencias fundamentales entre una práctica ingenua, una práctica “astuta” y otra crítica” Paulo Freire (1990:109) 1.
Deduciendo que la educación genera conciencia, y que la conciencia agudiza las exigencias sociales en cuanto a crítica del entorno, cambiando los niveles aspiracionales de vida a valores no solo materiales, propiciando por tal mayor desarrollo del individuo dentro de la sociedad misma, incrementando el desarrollo humano en los ámbitos culturales, de visión para detectar oportunidades de desarrollo, de capacidades y habilidades que pueden servir a generar flujos económicos enfocados al desarrollo social.
Por tal no debemos estar equivocados al sustentar nuestra apuesta nacional a re definir una educación que abarque desde el origen de nuestra identidad, a fin de re plantearla y revalorarla, que critique ampliamente la inequidad en los bienes y la riqueza en nuestro país, (problemática mencionada por Morelos en la fundación de nuestra nación), y que proponga alternativas justas de crecimiento social, con rumbo definido donde la prioridad no sea solamente la generación de riqueza empresarial con la justificación de generación de empleos, si no la equidad de oportunidades de desarrollo y sensibilización en el otro como seres iguales, donde nadie sea superior o inferior, solo más capacitado tal vez, y esto implica a su vez compromiso de desarrollo colectivo con el que se encuentra en una posición de desventaja.
Al replantearnos esta manera de pensar diferente, atacamos problemas que asfixian al país no dejándonos avanzar. Como ejemplo, la impunidad histórica que hemos sufrido nos ha llevado al salvajismo y a la prepotencia en todos los niveles, al haber educación fuerte, consiente y crítica, podemos pensar que las exigencias del pueblo serán mayores y reales por no permitir la impunidad en los sistemas de justicia social. Evidentemente al tocar este punto hablamos de la gran podredumbre que existe en el sistema de justicia hoy día, donde en la mayoría de los casos los favorecidos económicamente son impunes a esta, y el resto de la población es juzgada inequitativamente.
Otro problema actual es la falta de oportunidades generalizada en todos los niveles nacionales. Desde los segmentos económicamente desfavorecidos, donde la migración a las urbes desarrolladas en el interno del país o en el exterior de este es la solución generalizada que orilla a los habitantes de una población a salir del lugar donde han habitado a buscar oportunidades como mano de obra barata para elevar su condición económica, o en los segmentos medios, donde el recién graduado acaba generalmente haciendo trabajos que nunca pensó hacer en su vida de estudiante, y para los cuales nunca visualizo como motivación a realizar sus estudios, este termina siendo mal pagado, atrapado en una frustración donde no es clara la salida. En todo nivel social, al tener como centro de nuestra dinámica la generación de riqueza como fin mismo y no como fin desarrollador de la sociedad, una de las razones de la polarización de la riqueza, en donde quien es económicamente poderoso a comparación de los otros trabajará su vida entera para darse placer a sus necesidades exteriormente creadas, elevando cada vez más su riqueza, y quien es económicamente dependiente, trabajará su vida entera para apenas saciar sus necesidades básicas en el mejor de los casos, incrementando así con el paso del tiempo, cada vez más su miseria. Esta falta de oportunidades, por lo anteriormente explicado, es un círculo vicioso, que no parará más que en el desperdicio del potencial comunitario o en el desorden del caos social.
El día 10 de Noviembre del año en curso, el periódico la Jornada publicó una nota donde Arturo Mendicuri Narro, presidente de la Cámara Nacional de Comercio de la ciudad de México (CANACO), al hablar de la problemática actual de los “Ninis”, explica “que al ver negado el acceso al trabajo y el estudio, este sector de la población cae en el desencanto y la desesperación y ya no se esfuerzan por encontrar caminos dentro de la sociedad” 2. Más adelante Mendicuri agrega, “la sociedad debe trabajar en conjunto con los gobiernos para rescatar a estos jóvenes, pues se trata de una problemática en la que estamos involucrados toda la sociedad”. 2
Ángel Segura, presidente del Comité Nacional de Consulta y Participación de la Ciudadanía en Seguridad Pública, menciona en la misma nota citada en el párrafo anterior, “que se ha detectado, por ejemplo, que en algunos lugares del país los jóvenes están pensando en tener un promedio de vida de 15 a 25 años, involucrados en el narcotráfico”, comenta, “se trata de reconstruir el tejido social, ayudando a los jóvenes a salir de esa situación, generando políticas públicas para que tengan visión de vida diferente, tarea de la que la sociedad también se debe de hacer responsable desde sus casas y sus comunidades”. 2
Samuel Bowles comenta que en Estados Unidos las escuelas no han evolucionado hacia la igualdad, ya que sólo cubren .las necesidades de mano de obra calificada y disciplinada de los empleadores capitalistas (Bowles, 1977:137) 3. Esto refuerza el argumento, en el que la situación actual de oportunidades laborales, de desarrollo profesional y personal que vivimos hoy en día en nuestro país, ha desencadenado un malestar generalizado en la gente joven específicamente, dejando un sin sentido, donde el modelo de educación que vivimos actualmente, generador de trabajadores para las empresas, no brinda a los educandos las expectativas de vida y desarrollo que buscan, al contrario, brinda una depresión que lleva a la gente a la pasividad, dejando de lado el potencial principal de un país, el cual es su gente, brindando mentalidades perdidas en el sin sentido de “ni estudiar ni trabajar.”
La política es en un sentido, la voz del pueblo, tomando relevancia en el desencanto de la sociedad con su realidad inmediata, lo que hace imperativo el tomar el tema de replantear el pacto social desde la educación para dar solución a esta situación que se agudizan con el paso del tiempo. Por tal la política debe de accionar los cambios reales a estas perspectivas donde no pareciera haber sentido en estudiar y laborar, donde el modelo educativo actual no propicia el desarrollo de conciencias libres, propositivas y críticas, donde encontramos perdido al individuo como una pieza utilitaria en el engrane de la generación de capital y no así de desarrollo social colectivo.
Por tal, por muy devaluada que este al día de hoy el papel del político, debe de hacerse frente por medio de esta herramienta a este problema de fundamentos de valores sociales, deben de propiciarse las oportunidades reales al desarrollo del individuo, abarcando desde la manera en que este se concibe a si mismo dentro de la sociedad, el valor de su aportación a esta, el papel de no permitirse corromperse como persona, pues al hacerlo está permitiendo que se corrompa la sociedad misma, debe de ser valorado el hecho de levantar la voz y señalar la impunidad y la prepotencia, debe de centrarse el modelo económico y social actual en la persona y su desarrollo pleno en la sociedad.
Termino el presente escrito citando a Eduardo Galeano, donde habla del sistema económico de América Latina, en donde la educación forma parte de este sistema de empleados en servicio de la empresa generadora de capitales, y no generador de hombres libres con conciencias constructivas:
“El sistema encuentra su paradigma en la inmutable sociedad de las hormigas. Por eso se lleva mal con la historia de los hombres, por lo mucho que cambia. Y porque en la historia de los hombres cada acto de destrucción encuentra su respuesta, tarde o temprano, en un acto de creación”. 4
Tenemos frente a nosotros la oportunidad histórica de replantear nuestra manera de concebir la vida, de educarnos, de concebirnos. De la sociedad deben de surgir las propuestas, y es la política la encargada de escuchar al pueblo que representa, en ella recae la obligación de generar las fuerzas de acción que permitan el desarrollo de la sociedad dentro de ella misma, generando individuos sensibles, críticos, conscientes, con visión de hacia dónde ir en el mediano y largo plazo, esa “creación” de la que habla Galeano, es la creación de oportunidades reales de desarrollo, y para hacerlo se debe de poner al hombre como centro del sistema, y no como generador de capital solamente, el individuo es más complejo que esa propuesta que equivocadamente hemos seguido por mucho tiempo.
